Originalmente publicado hace poco más de 5 años, Assassin’s Creed Rogue fue un videojuego bastante exitoso que no contó con el soporte, ni la fortuna, de aparecer para Wii U, dejando con tristeza a una fracción de jugadores que únicamente contaban con la consola casera de Nintendo. Sin embargo, como un regalo de fin de década, Ubisoft sigue mostrando compromiso e interés por publicar títulos importantes para la comunidad nintendera y en esta ocasión nos comparte la Assassin’s Creed: The Rebel Collection, un compendio de dos videojuegos (Assassin’s Creed 4: Black Flag y Assassin’s Creed Rogue) a un excelente precio y con las ventajas propias de la híbrida japonesa.

Exclusivo para mayores de edad, Assassin’s Creed: The Rebel Collection ya puede ser adquirida para el Nintendo Switch en diferentes idiomas, entre ellos, el inglés, el español y el francés, con todo el contenido descargable y adicional que se publicó para ambos proyectos. Te recordamos que este review es sin spoilers, para que lo puedas leer con tranquilidad.

¿De qué se trata Assassin’s Creed: The Rebel Collection? ¿Cuáles son las ventajas de jugarlo en Nintendo Switch?


Como fue especificado previamente, Assassin’s Creed: The Rebel Collection es un port de dos videojuegos de Assassin’s Creed (Assassin’s Creed 4: Black Flag y Assassin’s Creed Rogue) para el Nintendo Switch. Por supuesto, a cinco años de su lanzamiento oficial -por llamarlo así-, existen toda clase de ventajas que se encuentran en esta nueva entrega que eran inexistentes en el pasado, como la posibilidad de llevar la consola a todas partes (en su modo portátil) con una increíble estabilidad en los cuadros por segundos que se reproducen en la pantalla. Del otro lado, a pesar de contar con un retrabajo gráfico, quizás algunos modelos, texturas y personajes pudieran lucir débiles cuando se comparan con los juegos más recientes de la franquicia pero no dejan de ser excelentes diseños que son son más que envidiados por varios videojuegos que fueron publicados en este mismo 2019 o que llegarán al mercado el próximo año.

Además de la posibilidad que se abre para muchos jugadores y jugadoras de Nintendo de disfrutar de dos grandes títulos, Ubisoft implementó algunas ventajas del Switch en el gameplay de ambos juegos, siendo las más importantes el rumble HD de los Joy-Con y el giroscopio de la consola (o en su defecto, el mando Pro si se juega con el dock).

En ambos títulos, la primera hora de juego se resume a un planteamiento de la historia (en el que estamos poniendo a prueba nuestra habilidad con la navegación marítima, las espadas y las cuchillas desde el primer minuto) y la presentación de las mecánicas básicas del título, por ejemplo, el sigilo, la recolección de coleccionables y los asesinatos, de los cuales estaremos hablando a profundidad, más adelante.

¿Qué es lo mejor de Assassin’s Creed: The Rebel Collection?


Ya sea que hayas ingresado al mundo de Assassin’s Creed de Odyssey u Origins para atrás o seas un fanático “hardcore” que no se pierde ni un solo lanzamiento del conflicto entre asesinos y templarios, ambos títulos presentan mundos abiertos, divididos en islas y ciudades que cuentan con vida propia y añaden horas y horas de rejugabilidad para acompañar una sólida historia que ha logrado a enamorar a más de un jugador y trascender de la industria de los videojuegos a otras tantas (por poner un ejemplo, Black Flag cuenta con un libro publicado por Bowden).

En cada espacio encontraremos asesinos, tiendas para mejorar nuestras armas, todo tipo de coleccionables, desde papeles para desbloquear pistas musicales, mapas y dinero, misiones tanto principales como secundarias y puntos de vista en lo alto de las construcciones, lo cual habilitará la sincronización para viajar libremente entre estos lugares y que irán puliendo nuestras habilidades de parcour a lo largo del tiempo.

Adicionalmente, los juegos se dan la oportunidad de explotar todo a su alrededor para generar más diversión en los jugadores, desde minijuegos en los bares hasta puzzles que podemos resolver en cuevas y monumentos que se vayan presentando en el camino. Puedes recolectar materiales (mediante la cacería o la exploración) para ir “crafteando” tus armas y expandir tu arsenal, a tu gusto. Cabe aclarar que el famoso modo de enfoque “eagle vision” también es explotado favorablemente, tanto en estas mecánicas auxiliares del gameplay como en el propio combate y en la planeación estrategica para sigilosamente salir vivo de los combates.

Si por algo serán recordados estos títulos en el futuro de la franquicia será por la introducción, y afinación, de los combates marítimos en el linaje de asesinos. Definitivamente era una apuesta arriesgada que un juego que se caracterizaba por la acción del combate de un jugador lograra mantener ese ímpetu y emoción en altamar, pero tanto Black Flag como Rogue logran mantener un interesante balance entre momentos relajados que suman a la narrativa e historia del juego y otros llenos de cañonazos, en los que nuestras unidades marítimas se verán retadas por todo tipo de villanos en el vasto mar. Finalmente, al igual que sucede con nuestro personaje principal y sus armas, podemos mejorar y llevar a un nuevo nivel nuestros buques, con mejoras que iremos consiguiendo, y desbloqueando, con el progreso en la historia.

¿En qué falla Assassin’s Creed: The Rebel Collection?


Lamentablemente, aunque el balance es positivo para esta colección de Assassin’s, hay algunas fallas que valen la pena señalar. La primera, es el audio. Desafortunadamente, tuve problemas para disfrutar el juego en español debido a que en ningún momento se me invitó a descargar, de forma gratuita, este contenido auditivo de la eShop y todo parecía un bug que solucioné jugando en inglés. Y, hablando de bugs, aunque es natural que en estos dos juegos, con horas y horas de recorrido, existan errores técnicos, los bugs que enfrenté no fueron realmente lascivos y no pasaron de algunos muros que se escalaron de forma extraña o algunos animales salvajes que recorrieran el agua y el mar a su voluntad.

En cuanto a la experiencia en Nintendo Switch, honestamente no me encontré, en el modo dock, con los Joy-Con. El gatillo izquierdo de los Joy-Con no es tan preciso como uno quisiera en un juego de sigilo y disfrute mucho más mi experiencia de juego, en pantalla grande, usando el viejo confiable control Pro del Nintendo Switch (que también permite disparar y manipular la vista empleando el giroscopio).

Para culminar, por momentos se vuelve monótono estar recolectando materiales y recursos (además de que la función de “loot” en ocasiones es bastante lenta y sueles cargar cuerpos de los difuntos en lugar de esculcarlos), lo que choca con el frenesí que tienes de un combate feroz y las pausas obligadas que debes hacer para derrumbar navíos enemigos y juntar todo lo que puedas intercambiar por mejoras para progresar en la historia.

Veredicto | Assassin’s Creed: The Rebel Collection


Assassin’s Creed: The Rebel Collection es una fantástica opción para los dueños de una Nintendo Switch que tengan algún tipo de interés por Assassin’s Creed. Si se trata de la vez que visitas este fantástico universo diseñado por el equipo de Ubisoft, te recomendaría iniciar desde los orígines de la franquicia para que disfrutes del progreso técnico y la historia de una forma natural o bien, de arriba para abajo, con Origins y Odyssey como puntos de inicio que te engancharán desde el primer instante (lamentablemente, estos títulos no se encuentran disponibles para plataformas de Nintendo).

La colección presenta dos ports sólidos, llenos de horas y horas de acción, descrubimiento y exploración para novatos y veteranos, y existen ventajas únicas de la híbrida japonesa, como el giroscopio y la posibilidad de continuar esta aventura sin importar el lugar donde te encuentres. Sin embargo, el juego pudiera mejorar en la velocidad que te presenta, la forma de apuntar empleando los controles por defecto del Switch y solucionar pequeños bugs que aunque no afectan la experiencia principal de juego, no le permiten alcanzar los niveles de excelencia de los títulos más reciente de la franquicia.